¿QUÉ ES LA TENDINITIS DEL HOMBRO?
La tendinitis del hombro o síndrome del manguito de los rotadores es una patología muy usual y representa la causa más frecuente de dolor en el hombro.
El hombro es una articulación muy compleja encargada de dar a la vez mucha movilidad al brazo con la estabilidad necesaria. Para poder realizar todos los movimientos tenemos 4 músculos, el supraespinoso, el infraespinoso y los redondos mayor y menor. La inflamación y las rupturas parciales o totales de los tendones de estos músculos nos provocan los síntomas de este cuadro.
Esta patología suele ocurrir per movimientos repetitivos o traumatismos, aunque en muchas ocasiones los enfermos no explican ningún antecedente.
El síndrome del manguito de los rotadores provoca dolor en el hombro al realizar determinados movimientos, los más típicos son al peinarse, al intentar abrocharse el sujetador o al ponerse un jersey. También es típico que el dolor aumente con el reposo nocturno.

¿Cómo se diagnostica?
El diagnostico del síndrome del manguito de los rotadores se realiza por la clínica y por la exploración física. A veces debe realizarse una radiografía (para descartar otras patologías) o una ecografía o una resonancia para confirmar la inflamación de uno o varios tendones o ver si hay roturas parciales o totales de los mismos.

¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento del síndrome del manguito de los rotadores consta de varias opciones dependiendo del tiempo de evolución, de la intensidad del dolor y de la incapacidad que provoca.  En los casos leves puede intentarse reposo, antiinflamatorios o rehabilitación. En casos muy crónicos o con mucho dolor pueden  realizarse infiltraciones. En algunos casos puntuales será necesaria la cirugía.

¿QUÉ SON LA EPICONDILITIS Y LA EPITROCLEITIS?
La epicondilitis (también conocida como codo del tenista) y la epitrocleitis (conocida como codo del golfista) son una causa muy frecuente de dolor en el codo.
La epicondilitis provoca dolor en la cara externa del codo, en la región del epicóndilo, la protuberancia ósea más externa del codo. Está provocada por movimientos repetitivos del codo (extensión y supinación, como los de golpear  la pelota con la raqueta, o levantar una bolsa), aunque en ocasiones el enfermo no explica ningún antecedente. En otras ocasiones se puede tratar de una enfermedad profesional, asociándose a profesiones que hacen movimientos repetitivos con la extremidades superiores ( montadores en fábricas, carniceros…) El dolor es secundario a una inflamación del tendón del músculo extensor del radial corto del carpo.
La epitrocleitis (o codo del golfista) en cambio, provoca dolor en la cara interna del codo, en la protuberancia ósea más interna. Suele estar provocada por movimientos repetitivos de flexión y pronación del codo (como sucede al golpear la pelota con el palo de golf), aunque en ocasiones no existe ningún antecedente. Al igual que en la epitrocleitis también se puede tratar de una dolencia ligada a la profesión.  El dolor se produce por la inflamación de los músculos que se insertan en la epitróclea.
En estas dos patologías el dolor aumenta al realizar el movimiento que utiliza los músculos afectos o al presionar la zona y mejora con el reposo.

¿Cómo se diagnostica?
En la mayoría de ocasiones con la historia clínica y la exploración física es suficiente para el diagnóstico. En caso de duda o si queremos descartar otras enfermedades pueden realizarse una radiografía, una ecografía o una resonancia magnética.

¿Cuál es el tratamiento?
Hay diversos tratamientos para estas patologías. Se suele empezar por los tratamientos menos invasivos, como es el reposo, el frio local, el uso de coderas o los antiinflamatorios (vía oral o en pomada o gel). Otra posibilidad son los analgésicos tópicos, como la capsaicina o la árnica. Si tras estos tratamientos no hay mejoría puede intentarse la rehabilitación (con ondas de choque, ultrasonidos, ejercicios…) o las infiltraciones con corticoides. En raras ocasiones en las que tras todo ello no hay respuesta al tratamiento puede valorarse la cirugía.

¿QUÉ ES LA TROCANTERITIS?
La trocanteritis o bursitis trocantérea es una de las causa más frecuentes de dolor en las caderas. Está provocada por la inflamación de la bursa trocantérea. Una bursa es una bolsita llena de líquido que tiene la función  de amortiguar el roce entre los tendones y los huesos. Cuando esta bolsa se inflama (a veces por golpes repetitivos), provoca dolor en la parte más externa y superficial de la cadera. Se trata de un dolor molesto, de intensidad cambiante y que puede despertar por la noche al cambiar de posición. Es un dolor, a diferencia del de la artrosis, que puede no tener relación con la marcha y que puede aparecer en reposo.

¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico de la trocanteritis se hace con una buena historia clínica y exploración física. Las pruebas de imagen no suelen ser necesarias. Debe diferenciarse de la artrosis de cadera o columna o de otras bursitis que pueden aparecer en zonas cercanas, como las bursitis glúteas.

¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento va des de la termoterapia local con frio, a pomadas/geles de antiinflamatorios pasando por analgésicos y antiinflamatorios por vía oral. La infiltración con corticoides y/o anestésicos es una opción muy eficaz cuando las medidas anteriores no funcionan. En casos concretos la terapia rehabilitadora puede ser de ayuda.